Néstor Rejón descubre desde niño la belleza del oro y los tesoros inabarcables que esconden algunas mujeres, casi todas las mujeres. Rejón se convierte en un orfebre del oro de gran éxito y desde la madurez, desde la experiencia de sus más de 60 años, rememora cómo ha sido su búsqueda permanente por encontrar siempre ese metal precioso, tan precioso y misterioso como las mujeres que amó. Desde La Cúpula, su villa en lo alto de Taormina, Sicilia, el joyero Rejón vive plácida e intensamente con la ítaloamericana Sarah D’Allara, una bellísima mujer, joven y curiosa, que es a la vez la suma de casi todas las mujeres que amó en su vida. Rememora su permanente búsqueda, desde que era niño, del tesoro más inaccesible, aquel que esconden algunas mujeres. Recrea cada una de sus historias de amor, desde su primera pasión en su casa familiar con Ela, la mujer que le cuidaba desde niño, hasta su encuentro con Sarah en un cóctel celebrado en Barcelona, manteniendo ambos relaciones que estaban en su ocaso: él, con la burguesa Ana Trejo; ella, con Tony Limp o. Desde una ardiente pasión desenfrenada con Carmen Zárate, en las minas de Colombia, hasta su fracasado matrimonio con Berta Solán... Desde su loca aventura en Nueva York con la mediocre actriz Mirta Casares hasta la imposible historia de amor con Ana Trejo...